Dermatitis periorificial: 5 datos sobre esta lesión 

¿Qué es la dermatitis periorificial? 

La dermatitis periorificial es una condición inflamatoria de la piel que no es contagiosa. Se caracteriza por la aparición de pequeñas lesiones superficiales agrupadas, que pueden ser de dos tipos: pápulo-pústulas (pequeños bultos con pus) o pápulo-vesículas (pequeños bultos con líquido). 

Estas lesiones suelen aparecer alrededor de la boca (perioral), los ojos y la nariz, y pueden causar picazón y, a veces, dolor. Aunque la condición puede comenzar agudamente, de forma rápida y severa, puede volverse recurrente, reapareciendo varias veces. 

Esta afección se observa más comúnmente en niños y en mujeres de mediana edad. Existe una variante llamada dermatitis periorificial granulomatosa, que es más frecuente en niños afroamericanos. En este tipo de dermatitis, las lesiones también aparecen alrededor de la boca, la nariz y los ojos, pero pueden extenderse a otras partes del cuerpo, como el tronco, las extremidades y los genitales. 

¿Qué la causa? 

La causa de la dermatitis periorificial es multifactorial, lo que significa que hay varias razones que pueden contribuir a su aparición. Un factor común es el uso prolongado e inadecuado de corticoides tópicos (cremas con esteroides) o inhalados, que pueden alterar la flora normal de los folículos pilosos en la piel. Además, se ha encontrado que ciertas bacterias, como las Fusobacterias, y Parásitos, como Demodex Folliculorum, pueden proliferar en estas condiciones. 

Otras posibles causas son el uso de cosméticos y componentes de pastas dentales y problemas en la barrera cutánea, la capa protectora de la piel. Es importante destacar que el uso crónico de corticoides tópicos puede llevar a formas más severas de dermatitis periorificial y a un mayor riesgo de recurrencia una vez que se suspenden, por lo que se requiere un tratamiento a largo plazo para lograr una mejoría completa.

¿Cómo se realiza el diagnóstico? 

El diagnóstico de la dermatitis periorificial se realiza principalmente de manera clínica, es decir, mediante la observación de los síntomas y la historia médica del paciente. Sin embargo, si los síntomas son inusuales o no responden al tratamiento, puede ser necesario realizar una biopsia de piel para confirmar el diagnóstico. 

Es importante diferenciar la dermatitis periorificial de otras condiciones similares, como el acné y la rosácea. El acné se caracteriza por la presencia de comedones (puntos negros y blancos), pústulas, pápulas, nódulos e incluso quistes. Por otro lado, la rosácea afecta principalmente el centro del rostro, no tiene comedones y puede afectar la nariz (rinofima) o causar síntomas oculares (rosácea ocular).

¿Cómo se trata? 

El primer paso en el tratamiento de la dermatitis periorificial es identificar y eliminar las posibles causas. Si el paciente ha estado usando corticoides tópicos, estos deben retirarse gradualmente para evitar rebotes. Es crucial establecer una rutina de cuidado de la piel que ayude a restaurar la barrera cutánea. 

El tratamiento puede incluir el uso de cremas o ungüentos que no contengan esteroides y que estén formulados para pieles sensibles. Además, en algunos casos, pueden recetarse antibióticos tópicos o sistémicos para combatir la proliferación bacteriana. Es fundamental evitar el uso de cosméticos y productos para la piel que contengan ingredientes irritantes o que puedan obstruir los poros. 

Recomendaciones 

Como dermatólogos, frecuentemente tratamos casos de dermatitis periorificial con una larga evolución. Es esencial identificar rápidamente las causas posibles para iniciar el tratamiento adecuado. Evite la automedicación, ya que puede empeorar la condición y prolongar su duración. Si sospecha que tiene dermatitis periorificial, consulte a un dermatólogo para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados. 

En resumen, la dermatitis periorificial es una condición inflamatoria de la piel que puede ser molesta pero tratable. Con el cuidado adecuado y la identificación de los factores desencadenantes, es posible manejar esta condición y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.

Escrito por: Dra. Zulay Zabala Suárez 

Medica Dermatóloga 

Instagram: @zulayzabala.dermatologa 

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